martes, 28 de abril de 2009

Abrir un espacio

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Necesito abrir un espacio. Detener por un momento este flujo intenso que nos arrastra por los días.
Quiero construir un momentáneo instante de eternidad para poder captar este devenir amor, devenir animal en el que me sumerjo con vos cada día.
Es que la fuerza de este río es tan amplia y extensa que necesito detenerla sólo un momento para poder captarla y no perderme totalmente en su torbellino. Recordar que una vez no estuviste; que una vez llegaste a mi vida.

Y ahora, cuando palabra tras palabra ato nudos de pequeña magia que permiten retener tanta vivencia; levanto un poco mi cabeza y me doy cuenta maravillado de lo que estamos construyendo. Mejor dicho de lo que nos está sucediendo juntos.
Porque finalmente somos nosotros los que, atados con nudos de pequeños hechiceros, hacemos de cauces de este río poderoso. Horizontes de este mundo gigantesco.

Límites de esta profundidad indefinida.



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viernes, 24 de abril de 2009

Exp Psicoactivas: Fiebre

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Elemento psicoactivo: fiebre gripal aprox 40 grados
Contexto: durante la noche, intentando dormir



Quería dormir y no lo conseguía. Tenía una gripe terrible con fiebre muy alta.
La cama era incómoda en cualquier posición. Me dolía la piel y transpiraba un sudor frío.
Creo que me quedé dormido, no lo sé con claridad. Pero sé que de repente me encontré en un estado muy extraño de conciencia o pensamiento. Así comenzó esta experiencia:

Yo y una pelotita. Estamos frente a frente. Hay tensión en el ambiente. Algo va a pasar.
La pelotita comienza a moverse alrededor mío. Gira con velocidad creciente. Cada vez más y más rápido.
Comienzo a asustarme, esto que parecía un movimiento convencional/conceptual (sólo hace un giro normal de pelotita) comienza a cambiar radicalmente de característica. Es un giro absolutamente loco. Acelera peligrosamente y en cada giro (muy pequeño dado que solo es alrededor mío) dobla su velocidad que en poco tiempo es infinita.
Ya no es sólo la pelotita, todos los elementos de la habitación giran, capto el giro infinitamente veloz de todos los átomos del puto universo alrededor de mi cabeza.
Es demasiado, no puedo soportarlo. Abro los ojos para frenarlo.


Se frena por un momento. Pero es peor: ahora vuelvo a tener un parámetro de quietud que vuelve a dimensionar el movimiento.
Y peor: la pelotita está maléficamente quieta, estamos enfrentados nuevamente en un estado de tensión terrible. Todo ese mundo de giro veloz se detiene para mostrarme su potencia.
Y comienza otra vez. Los primeros 2, 3 o 4 giros aún son observables, aún son de este mundo; pero los siguientes vuelven a salirse más allá de mi comprensión. Spin de todos los átomos que en sí mismos son grandes bloques de universos llenos de enormes sistemas solares y planetas, y materia de átomos girando que a su vez….
Abro los ojos y freno, sólo por un instante y vuelvo a caer en el vértigo. No es posible detenerlo.

En un momento, sin pensarlo, me alejo un poco. Sólo un poco pero lo suficiente para comprender que ahí esta la clave: distanciarme de Yo y la pelotita.
Y a medida en que me relajo me voy. Y a medida en que me voy más me relajo. Suavemente, no me interesa interferir en su juego.
Yo y la pelotita siguen enfrentados, y lo estarán por siempre, en un loco y eterno juego de movimiento.

Y me voy, y me duermo. Un rato.



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